La corredora de Bielorrusia Krystina Tsimanouskaya ha caído envuelta en un caso que trasciende fronteras en el Este de Europa. Según noticias que llegan desde los Juegos Olímpicos de Tokio, la atleta no viajó hasta el país europeo, atribuyendo este hecho a errores cometidos por la delegación de su país en las Olimpiadas
Las autoridades de Bielorrusa expresaron que ella fue sacada de la delegación por su estado emocional, información que ha desmentido la atleta para medios internacionales. Se informó también que ha pedido asilo político en Polonia.